Participante del I Premio de Arqueología y Paleontología Fundación Palarq
En el marco “Actualidad de la investigación arqueológica en España”, organizado por el Museo Arqueológico Nacional en colaboración con la Fundación Palarq
Se realizará el martes 29 de enero, a las 18h en el MAN y la asistencia es libre y gratuita
“El poblado neolítico de La Draga (Banyoles, Girona). Resultados de las excavaciones recientes y nuevos retos de investigación” es el título de la charla que ofrecerán Xavier Terradas (IMF-CSIC, Barcelona), Antoni Palomo (Museu d‟Arqueologia de Catalunya, Barcelona) y Raquel Piqué (Universitat Autònoma de Barcelona) , el martes 22 de enero, a las 18h, en la sala de conferencias del Museo Arqueológico Nacional (MAN), en el marco del ciclo “La actualidad de la investigación arqueológica en España”.
La asistencia es libre y gratuita.
Desde 1991 venimos realizando excavaciones en el yacimiento arqueológico de La Draga. Su ubicación en la orilla oriental del Lago de Banyoles ha propiciado que los suelos de ocupación estén cubiertos en parte por las aguas freáticas subterráneas, favoreciendo un ambiente anóxico y la preservación de restos de madera y materia orgánica.
El yacimiento correspondería a un poblado de campesinos del Neolítico antiguo que se establecieron en el lugar entre el 5.300 y el 4.900 a.C. A lo largo de este periodo se documentan dos fases constructivas distintas en base a su cronología, materiales empleados y funcionalidad de las estructuras.
La Draga es un yacimiento único en la Península Ibérica y uno de los más interesantes del Mediterráneo occidental, debido a que en él se conservan las herramientas de madera más antiguas jamás encontradas hasta ahora en la Península. Las condiciones excepcionales de conservación se deben a la inclusión de los niveles arqueológicos en la capa freática de las orillas del lago de Banyoles; además, una parte del yacimiento se encuentra totalmente sumergida en el mismo lago. El yacimiento correspondería a un poblado de campesinos del Neolítico antiguo que se establecieron en el lugar entre el 5.300 y el 4.900 a.C. A lo largo de este periodo se documentan dos fases constructivas distintas en base a su cronología, materiales empleados y funcionalidad de las estructuras. Por su cronología el yacimiento es clave para comprender el origen y la implantación de las comunidades campesinas en el Mediterráneo occidental.
Hasta le fecha se han recuperado una gran diversidad de objetos de madera y fibras vegetales, entre ellos más de un millar de postes de roble pertenecientes a las estructuras construidas, instrumentos agrícolas como hoces y palos cavadores, arcos de tejo, cestos, mangos o cuerdas. Además, los hallazgos en el yacimiento han permitido documentar una ganadería y agricultura plenamente establecida, así como diversas producciones entre las que destacan una incipiente tecnología textil o la producción de ornamentos.
La Draga se descubrió en 1990 y desde entonces se han sucedido las campañas de excavación bajo la coordinación de la Universidad Autónoma de Barcelona, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IMF, Barcelona), el Museo de Arqueología de Catalunya y el Museo Arqueológico de Banyoles. Las excavaciones de la Draga han sido financiadas por un proyecto del Departamento de Cultura de la Generalidad de Cataluña, mientras que la investigación ha recibido apoyo del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades mediante un proyecto coordinado entre el CSIC y la UAB, así como del programa Recercaixa.
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