Descubierto un horno productor de cerámica en un yacimiento íbero que evidencia que el Maresme podía haber sido un centro de producción 150 años a.C.
Un estudio aplica el método científico a los llamados «paleodermatoglifos» para conocer su edad y su sexo, además de algunos rasgos sociales.
Las 18 cuevas se reparten por Cantabria, Asturias y País Vasco, y todas cuentan con destacadas muestras de arte rupestre perteneciente al Paleolítico. Muchas son excelentes ejemplos de la escuela artística franco-cantábrica, en la que encontramos realistas representaciones de animales característicos de la última era glaciar, como son los bisontes, los caballos, los uros o…
Los resultados obtenidos, a partir del análisis de pigmentos, resaltan la singularidad de las paredes del conjunto arqueológico, el óptimo estado de conservación de las decoraciones y la riqueza y variedad de la paleta cromática empleada en su decoración.
Un estudio de la Universidad de Murcia califica de “tesoro único”, tras 25 años de investigaciones, la íbera Libisosa destruida por los romanos en el siglo I a. C.
Contenía los esqueletos de tres hombres y una mujer, con ricas cerámicas que aún conservan los restos del banquete dejado a los difuntos.
La investigadora del CENIEH Nohemi Sala ha obtenido 1,5 millones de euros del Consejo Europeo de Investigación, a través de una beca ERC-Starting Grant, para rastrear en el registro fósil las raíces y la evolución del comportamiento funerario de nuestros ancestros.
Los huesos de los caídos en combate hace 3.000 años en lo que hoy es Alemania ayudan a entender cómo la tolerancia a la lactosa se extendió rápidamente.
Este parque nacional de Colombia, declarado patrimonio cultural y biológico de la humanidad por la UNESCO en 2018, ha sido definido como la «Capilla Sixtina» de la arqueología en América Latina.
La Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA) ha anunciado el descubrimiento de varias docenas de artefactos de piedra que se remontan al Período del Primer Templo, hace más de 2500 años.
Un tsunami y la tala indiscriminada de los bosques próximos abortó en el siglo VII a. C. el proyecto de una nueva ciudad en la bahía de Málaga.
Los huesos ya eran “antiguos” cuando finalmente encontraron su reposo eterno. Eran reliquias que habían pasado de generación en generación como símbolo de “poder”, conservadas por personas o grupos que tenían una relación estrecha con el fallecido.