Los neandertales recién nacidos tenían una caja torácica potente y amplia como la de los adultos (CENIEH 8/10/20)
El CENIEH publica un artículo en la revista Science Advances que demuestra que el tórax de esta especie humana estaba determinado genéticamente y no era fruto del desarrollo. Este condicionamiento tendría un significado evolutivo, ya que habría sido “heredado” de especies anteriores.